Humedales Ramsar en Ecuador: Guardianes del Agua y la Biodiversidad en el Camino a la Lista Verde

Ecuador alberga 19 humedales Ramsar reconocidos a nivel internacional por su importancia ecológica, social y climática. Estos ecosistemas desempeñan un papel fundamental en la regulación del agua, la conservación de especies clave y el sustento de comunidades locales. Sin embargo, muchos enfrentan amenazas crecientes como la deforestación, la contaminación y la expansión de actividades humanas. 

La Lista Verde de Áreas Protegidas y Conservadas de la UICN no se centra exclusivamente en humedales, sino en garantizar una gestión efectiva en áreas protegidas y conservadas en general. Sin embargo, varios de los humedales Ramsar en Ecuador se encuentran dentro de áreas protegidas que forman parte de la Lista Verde o están en proceso de certificación, lo que representa una oportunidad para reforzar su manejo sostenible y garantizar su conservación a largo plazo bajo estándares internacionales. 

A continuación, se presentan algunos de los humedales Ramsar ecuatorianos que coinciden con áreas protegidas certificadas o en proceso de certificación en la Lista Verde.

Este es el humedal Ramsar más grande de Ecuador, con una extensión de 773,668 hectáreas. Su ecosistema amazónico alberga una biodiversidad excepcional y desempeña un papel clave en la regulación climática global. Su territorio se superpone completamente con la Reserva de Producción Faunística Cuyabeno y el Parque Nacional Yasuní, áreas protegidas de gran relevancia ecológica. Estas zonas son el hogar de especies emblemáticas como el delfín rosado, la nutria gigante y el jaguar, además de contar con comunidades indígenas como los Siona, Secoya y Waorani, que han mantenido una relación armoniosa con su entorno durante siglos. 

El proceso de certificación en la Lista Verde de estas áreas protegidas permitirá fortalecer su gestión a través de la gobernanza participativa, el monitoreo ecológico y la implementación de estrategias de conservación basadas en evidencia científica.  

Este sitio Ramsar, con un área de 12,290 hectáreas, no abarca la totalidad del Parque Nacional Cayambe Coca, sino una serie de lagunas de origen glacial que cumplen un rol clave en la regulación hídrica de Quito y otras ciudades andinas. Además de ser una importante fuente de agua, el ecosistema protege especies como el oso de anteojos, considerado un indicador de la salud ambiental del páramo. 

El Parque Nacional Cayambe Coca está en proceso de certificación en la Lista Verde, lo que fortalecerá la conservación de estos humedales de alta montaña. El estándar de Lista Verde permitirá mejorar la planificación de su manejo, garantizar la sostenibilidad de los ecosistemas y reforzar la integración de las comunidades locales en su gestión. 

Estos humedales, con una extensión de 872 hectáreas, forman parte del Parque Nacional Galápagos, aunque la designación Ramsar solo cubre una fracción del parque. Protegen una serie de lagunas costeras y humedales de marea, que son refugio de especies endémicas como el flamingo rosado y la tortuga gigante. 

Su ecosistema marino y costero es fundamental para la regulación del clima y el mantenimiento de la biodiversidad en el archipiélago. Aunque la designación Ramsar es limitada a un área específica, la gestión integral del Parque Nacional Galápagos ha sido fortalecida gracias a su inclusión en la Lista Verde, permitiendo una conservación efectiva y el equilibrio entre el turismo sostenible y la protección de sus ecosistemas. 

Ubicada en la provincia de Sucumbíos, esta reserva protege un ecosistema amazónico de lagunas y humedales con una extensión de 4,613 hectáreas. Alberga más de 450 especies de aves, lo que la convierte en un santuario clave para la observación de fauna silvestre. Su importancia radica en su capacidad de regular los ciclos hídricos, capturar carbono y servir como hábitat para especies vulnerables. 

El proceso de certificación en la Lista Verde ha impulsado el desarrollo de estrategias de conservación basadas en el monitoreo participativo y la gestión comunitaria, garantizando la sostenibilidad de estos ecosistemas. La articulación entre la administración del área protegida y las comunidades locales ha permitido generar un modelo de gobernanza eficaz y replicable. 

Si bien la Lista Verde de la UICN no se enfoca exclusivamente en humedales, su implementación en las áreas protegidas que albergan estos ecosistemas representa una gran oportunidad para reforzar su conservación. La certificación bajo este estándar permite garantizar una gestión efectiva y adaptativa, promoviendo una mejor planificación y gobernanza de los recursos naturales. 

Para fortalecer la conservación de los humedales Ramsar en Ecuador y asegurar su sostenibilidad, es clave avanzar en acciones concretas, como el monitoreo científico, la participación de comunidades indígenas y locales, el acceso a financiamiento sostenible, la promoción de turismo responsable y la adopción de un enfoque de gestión basado en estándares internacionales de conservación. 

Como parte de los esfuerzos para potenciar la conservación de la biodiversidad en los humedales Ramsar de Ecuador, UICN Sudamérica ha firmado un convenio de colaboración con WWF-Ecuador para unir esfuerzos en la protección del jaguar y el delfín rosado en el humedal de Cuyabeno. 

Este acuerdo busca fortalecer la conservación de estas especies emblemáticas aprovechando las herramientas de la Lista Verde y los estándares de Conservación Asegurada, garantizando que estos ecosistemas sigan siendo refugio para la vida silvestre y fuente de bienestar para las comunidades locales. 

La alianza representa un paso clave para consolidar la gestión efectiva del Complejo de Humedales Cuyabeno-Lagartococha-Yasuní, asegurando su protección bajo un enfoque integral que combina ciencia, participación comunitaria y estándares internacionales de conservación. 

La inclusión de Cuyabeno-Yasuní, Cayambe Coca, Limoncocha y Galápagos en la Lista Verde representa un paso crucial para asegurar su conservación a largo plazo. Ecuador tiene el potencial de consolidarse como un referente global en la conservación de humedales, promoviendo una gestión efectiva y la integración de más áreas protegidas a la Lista Verde. 

Apostar por este estándar no solo protegerá estos ecosistemas críticos, sino que también garantizará su sostenibilidad y el bienestar de las comunidades que dependen de ellos. La conservación de los humedales Ramsar es una tarea urgente y una responsabilidad compartida que asegurará la protección del agua, la biodiversidad y los servicios ecosistémicos para las generaciones futuras. 

Si deseas sumar esfuerzos o apoyar los procesos de conservación y mejora continua en estos maravillosos espacios, puedes escribir a [email protected].