Mujeres del Altiplano de Guatemala encabezan red de personas promotoras de buenas prácticas agrícolas
Bajo la metodología capacitación de capacitadores, el proyecto Altiplano Resiliente, liderado por la UICN, impulsa la adopción de sistemas agroforestales y medidas de conservación de suelo y agua, en beneficio de las cuencas de los ríos Motagua, Coyolate, Chixoy y Samalá.
Ciudad de Guatemala, Guatemala, 18 de septiembre, 2023 (UICN). Sistemas MIAF (Maíz Intercalado con Árboles Frutales), incorporación de árboles dispersos y en contornos, prácticas de conservación de suelo y agua como acequias y barreras vivas son parte de las medidas de Adaptación basada en Ecosistemas (AbE) que se esperan implementar en 459 hectáreas agrícolas del Altiplano guatemalteco.
La misión está a cargo de 461 personas de las cuencas de los ríos Motagua, Coyolate, Chixoy y Samalá 124 hombres y 337 mujeres, capacitadas como promotores de medidas AbE, bajo el sistema de extensión del proyecto Altiplano Resiliente, liderado por la UICN (Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza).
Para la creación de esta red, se coordinó con el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación (MAGA), Agencias Municipales de Extensión Rural (AMER), Educadoras de Hogar Rural, Direcciones Municipales de la Mujer y representantes de los Consejos Comunitarios de Desarrollo Urbano y Rural (COCODE), del Altiplano Occidental de Guatemala, área de cobertura del proyecto Altiplano Resiliente.
Las personas integrantes de esta red forman parte de los Centros de Aprendizaje para el Desarrollo Rural (CADER), a través de los cuales, y mediante los modelos de extensión de “aprender haciendo” y de “campesino a campesino”, impulsarán la implementación de medidas de adaptación basada en ecosistemas, como los Sistemas Agroforestales (SAF).
En los SAF se incorporan especies como: encino (Quercus sp), aliso (Alnus sp), pino (Pinus sp), ciprés (Cupressus lusitanica), palo de pito (Erythrina berteroana), sauco (Sambucus canadensis), melocotón (Prunus persica L. Batsch) Var. Salcajá, aguacate (Persea americana) Var. Hass, ciruela (Prunus sp), limón persa (Citrus latifolia Tanaka) y manzana (Pyrus malus L.).
En el proceso de formación se desarrollaron aspectos conceptuales de clima, resultados de análisis de oportunidades de restauración (ROAM), prácticas de conservación de suelo y agua, incentivos forestales y modelos SAF, que promueven la obtención de servicios ambientales bajo un enfoque de género, y de reconocimiento y rescate de los conocimientos tradicionales.
Para Ingrid Beatriz Sacvin, de la aldea Chuicaca, de la microcuenca Paxocol, en Totonicapán,
A través de la red de promotoras, hemos aprendido mucho a mejorar nuestros cultivos, sembrando árboles frutales y forestales dentro de nuestras parcelas, incorporando abono orgánico, haciendo conservación de suelo, y les agradecemos mucho porque nos está ayudando bastante.
El plan de capacitación incluyó medidas responsivas de género para fomentar la participación y liderazgo de las mujeres, y asegurar beneficios equitativos para mujeres y hombres, fundamentalmente orientadas a cerrar brechas de desigualdad, en términos de acceso a capacitación, asistencia técnica e insumos productivos para las mujeres, que aseguren la incorporación de las medidas AbE en sus parcelas.
Las acciones sensibles al género consideradas durante el proceso fueron: horarios diferenciados, cuidado infantil durante las sesiones, definición de lugares accesibles, entre otros esfuerzos, en el marco de la implementación de la estrategia de género e inclusión social del proyecto.
De acuerdo con Raquel Sigüenza, representante de la UICN en Guatemala,
Por medio de esta red de promotores de medidas AbE se está respondiendo a los planes de manejo, formulados por los Consejos de Microcuenca.
Desde 2020, Altiplano Resiliente busca reducir el impacto del cambio climático en el ciclo hidrológico de las cuencas del altiplano guatemalteco, para aumentar la resiliencia del ecosistema y las poblaciones locales.
El proyecto Altiplano Resiliente es implementado por el Ministerio de Ambiente y Recursos Naturales (MARN), el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación (MAGA), el Instituto Nacional de Bosques (INAB), y el Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología (INSIVUMEH), con la asistencia técnica y financiera de la UICN, en colaboración con la Fundación para la Conservación de los Recursos Naturales y Ambiente en Guatemala (FCG) y la Universidad Rafael Landívar, a través del Instituto de Investigación en Ciencias Naturales y Tecnología (IARNA) de la Vicerrectoría de Investigación y Proyección (URL-VRIP), gracias a fondos provenientes del GCF (Green Climate Fund) y la Agencia de Cooperación Internacional de Corea (KOICA).